Sucesos. 1 de enero
Un cotillón privado de Nochevieja finaliza con un tiroteo y tres muertos.
El tiroteo tuvo lugar diez minutos después de las campanadas de media noche según algunos testigos que pasaban en ese momento por la calle. “Al principio pensamos que se trataba de una traca de petardos”. Una pareja de jóvenes que estaban celebrando el fin de año y se dirigía a una famosa discoteca en esa misma calle del centro financiero de la ciudad vieron a varios grupos de personas abandonar de forma precipitada el edificio en el que horas después se encontraron los cadáveres. “En ese momento no sospechamos nada y a la salida del bar nos encontramos con el cordón policial y la prensa”, declaraba uno de los testigos del tiroteo que ha preferido mantener el anonimato. Una llamada sin identificar realizada a la policía en torno a las 3 de la madrugada avisó de lo sucedido. Los cuerpos se encontraron en la segunda planta de un edificio de reciente construcción destinado a apartamentos de lujo y cuyo propietario, al término de la redacción del presente teletipo, todavía se desconoce. El bloque de apartamentos se encuentra sin inquilinos por lo que el edificio en el momento del suceso se encontraba completamente vacío a excepción de los invitados a la fiesta. Según el portavoz de la policía, los primeros indicios hacen pensar en un ajuste de cuentas, pero será fundamental para la investigación abierta identificar no sólo los cuerpos encontrados sino también a las personas que fueron invitadas a la fiesta así como a las personas que alquilaron el apartamento y organizaron el cotillón.